Nearshoring: los retos de trasladar operaciones a México

El país atraviesa un 'boom' de crecimiento del proceso

12 de julio de 2023Infraestructura
Por Paulo Alfaro 

México se ha beneficiado notablemente del proceso de nearshoring. Las razones incluyen el conflicto comercial entre Estados Unidos y China, la guerra en Ucrania, la dura política monetaria mundial -consecuencia de los altos niveles de inflación- y la desaceleración económica mundial que ha afectado a las empresas de construcción y manufactura, lo que hace necesario reducir los costos logísticos y de transporte.

La pandemia provocada por COVID-19 también tuvo un gran impacto, ya que interrumpió las cadenas de suministro y limitó la oferta. Este escenario desencadenó en las empresas la estrategia de regionalización en México, fenómeno conocido como nearshoring.

El territorio nacional es el destino ideal para que empresas del exterior trasladen sus operaciones y procesos, especialmente las de Estados Unidos, debido a su ubicación geográfica, las asociaciones comerciales firmadas y la mano de obra barata y calificada.

En una reunión privada organizada por GRI Club, inversionistas, operadores y financiadores profundizaron el debate sobre estas ventajas, basándose en los estudios realizados por Bancomext, que viene ofreciendo oportunidades especiales de financiación para proyectos de nearshoring en México.

El debate fue conducido por Marian Aguirre Nienau, titular de la Unidad de Banca de Empresas de Bancomext. Según ella, el hecho de que México ya esté inserto en este ecosistema de negocios y familiarizado con empresas de Estados Unidos y Canadá lo convierte en favorito para impulsar el nearshoring.
El encuentro tuvo lugar en la sede de Baker McKenzie (foto: GRI Club)

Ventaja Comercial y mano de obra cualificada

No cabe duda del potencial comercial de México. En total, hay 14 tratados comerciales en todo el mundo, que involucran a 52 países en diferentes modalidades y representan el 59% del PIB mundial. Entre los acuerdos se encuentran el Tratado de Libre Comercio MéxicoUnión Europea (TLCUEM) y el Tratado de Libre Comercio México-Estados Unidos-Canadá (T-MEC). 

Sobre esto último, es importante destacar la intención de México de penetrar en los principales mercados de Estados Unidos y Canadá, aprovechando los beneficios que aporta el tratado para fortalecerse frente a otros mercados.

Sin embargo, una de las preocupaciones expresadas por los participantes es si este acuerdo será renovado en caso de un cambio político en Estados Unidos, dada la posibilidad de que un nuevo liderazgo utilice el T-MEC como vehículo electoral y lo manipule de tal manera que no ofrezca los mismos incentivos. El acuerdo tiene una vigencia de 16 años, pero en el segundo semestre de 2026 se llevará a cabo una revisión de las condiciones.

“En 2026, vamos a enfrentar una realidad donde el tratado se puede modificar, a pesar de que tiene una vigencia más grande”, comenta, preocupado, un ejecutivo.




Cabe mencionar que México cuenta con 17 sectores productivos que se exportan a Estados Unidos, los cuales representan el 14% de las importaciones realizadas por el país estadounidense. A pesar de esta fortaleza comercial, Marian Aguirre Nienau señala que el comercio puede ser mejor explotado.

Como ejemplo, destaca las importaciones en la industria química, donde Estados Unidos importan 72 mil millones de dólares, de los cuales sólo 2% proviene de México. “Hay sectores que tienen mucho potencial para invertir”, añade.
 
Marian Aguirre Nienau fue la invitada especial de la reunión (Foto: GRI Club)

Canadá, por su parte, cuenta con el 5% de las importaciones mexicanas, con 28 productos en 11 sectores productivos -México es su tercer principal proveedor. Los canadienses también han hecho una fuerte presencia en México en busca de mano de obra calificada y barata -otro factor que justifica el ‘boom’ del nearshoring en el país.

Un participante menciona el ejemplo de una empresa manufacturera canadiense que pretende establecerse en el territorio mexicano. Para ello, una de las estrategias utilizadas es proporcionar vivienda a sus empleados con el fin de retenerlos dentro de la empresa.

En otro ejemplo de una empresa manufacturera de Canadá, explica que el interés por la mano de obra mexicana es tal que muchas veces la intención de las compañías se limita sólo a este requisito.

También relata una conversación que tuvo con un manufacturero, a quien le hizo el siguiente comentario: “No nos interesa el mercado mexicano. Entendemos la posibilidad de utilizarlo como plataforma, pero lo que nos interesa en este momento es poder manufacturar en México y poder exportar nuevamente hacia Canadá y Estados Unidos desde México”.

De acuerdo con otro ejecutivo, los alemanes reconocen a México como el único país del mundo cuyos ingenieros tienen la misma calidad que los alemanes, y es precisamente esta ventaja a la que muchas empresas ponen atención.

Los ejecutivos, sin embargo, señalan que la mano de obra podría ser aún más cualificada si el país aprovechara la excesiva cantidad de personas en la frontera que quieren emigrar a Estados Unidos en busca de trabajo: “Este problema de mano de obra puede traer un problema social”, alerta un participante.

Los retos que hay que afrontar

La plataforma manufacturera es uno de los factores positivos para la inserción del nearshoring en México, dados los planes estratégicos en automotriz, electrónica, alimentos, entre otros sectores. Sin embargo, los players comentan algunos de los retos de operar en el país, como la falta de educación financiera por parte de las empresas que no son sofisticadas, que pecan en su modelo corporativo, en el uso de la nómina, entre otros problemas.

Además, la infraestructura logística sigue comprometiendo la instalación de naves industriales, pero se cree que en este caso hay inversiones en curso por parte del gobierno para resolver el problema.

“Si realmente el país está invirtiendo en infraestructura, en desarrollo, es porque está buscando planes de largo plazo, entonces yo esperaría que el nearshoring llegue para quedarse”, opina Marian Aguirre Nienau.

Otro reto mencionado consiste en la viabilidad de los terrenos para establecer operaciones de manufactura. Muchas empresas que deciden operar en estos espacios no realizan un estudio adecuado sobre la disponibilidad de infraestructura, agua, electricidad, gas, etc.

“Necesitas tener un contrato sólido que te permita tener los recursos suficientes en caso de que la obra no se entregue a tiempo o no se entregue en forma, y me parece que es uno de los temas que vamos a empezar a ver muchísimo”, observa un participante.

En cuanto a la actuación de empresas más estructuradas, Tesla fue utilizada varias veces como ejemplo durante el encuentro. La empresa, que pertenece al sector automotriz, anunció en marzo la instalación de una fábrica en el municipio de Nuevo León para producir coches eléctricos, siendo la primera planta de la compañía en América Latina. La inversión prevista es de US$5.000 millones, en su primera fase, según la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Para uno de los participantes, Tesla puede cometer el error de no contratar proveedores de servicios de alto nivel: “Cuando no hay gente con alto grado de sofisticación, que no conoce bien los temas, habrá problemas más adelante, por mucho apoyo que tengas”. Vale la pena mencionar que Tesla ya cuenta con proveedores en Nuevo León que trabajan con estructura de asientos, circuitos electrónicos y equipos de automatización.

Siguiendo con el tema de las grandes inversiones que llegan a México, Bancomext ha dado el apoyo necesario a aquellas empresas asiáticas y europeas que se embarcan con sus respectivos ecosistemas, que incluyen la presencia de decenas de proveedores de servicios. Sin entrar en detalles, la institución financiera ha lanzado un programa destinado a financiar a proveedores del sector automotriz, donde se evaluará el historial crediticio.

La atención puesta en las prácticas sostenibles

La transferencia de operaciones de una empresa engloba ciertamente una preocupación por las emisiones de carbono. Sin embargo, la preocupación por este tema debe ir más allá de cuestiones económico-financieras, puesto que también se refiere al deber de conservación del medio ambiente, dadas las emisiones de gases de efecto invernadero desencadenadas por la infraestructura de transporte, la construcción, etc.

“Es una tendencia que llegó para quedarse y cada vez más empresas, inversionistas, están viendo que este tema es importante, y por eso en México, aunque nos falte todavía la parte regulatoria y de políticas, tenemos que seguir invirtiendo en esto”, comenta una participante.

En lo que se refiere a beneficios económicos, las empresas energéticas son un buen ejemplo de cómo las prácticas pueden facilitar la vida de un empresario. En los últimos 12 años, las empresas energéticas han reducido drásticamente sus costos de producción como resultado de la introducción de paneles solares, lo cual hizo que México obtuviera una inversión de casi 10 mil millones de dólares entre 2017 y 2022.

Desde el punto de vista de la financiación, Bancomext informa que ofrece condiciones dirigidas a proyectos de energías renovables, y que no es difícil conseguir este soporte: “Hemos tenido acercamientos con muchas empresas”, añade.

Ahora, los inversores consideran posible que la próxima tendencia sea la implantación de baterías, que podrían aportar una solución más inmediata y relativamente sencilla a la falta de capacidad de generación de electricidad. Esto sería un catalizador para el nearshoring a escala regional.

Aún sobre la necesidad de potenciar el nearshoring por zonas, es importante entender las vocaciones productivas de cada región y, posteriormente, buscar acercamientos con los gobiernos. Hay zonas más desarrolladas que pueden promover mayores inversiones, mientras que otras carecen aún de mayor y mejor estructura. Las ventajas económicas y las elecciones presidenciales en el país [mandato político], sin duda, pesan en el desempeño.

Por parte de las empresas, un participante señala que la inversión de Tesla ilustra la confianza en invertir en México, aunque existe conciencia de los retos, entre los que destaca la seguridad jurídica.

(Foto: GRI Club)